

"Fin, es lo que deseas leer"
¿Sabes aquella sensación de cuando vas de acampada en plena adolescencia, y empiezas a ver, o imaginarte mas bien, cosas extrañas, por aquello de dar salsa a la escapada, o fruto simplemente de la inocencia?, pues esto es lo mismo pero con adultos y un montón de melodramas.
Mi política es la de no contar nada, pero en este caso no hacerlo es castigar a futuros lectores, y me lo podréis reprochar "Porque no avisaste", aunque al menos, de entrada, te digo que de miedo no es, y de misterio... según tu grado de curiosidad.
La lectura discurre entre párrafos saturados de adornos, innecesarios diría yo, con un arranque un poco abrupto, en cuanto a la presentación de personajes se refiere, donde el autor parece tener prisa por asegurarse de que sepamos quien es quien nada más aparecer en escena. Bien es cierto que cada cual es fiel al rol asignado durante el desarrollo de la obra.
En un principio la lectura promete, sobre todo durante los primeros acontecimientos, incluso llega a atraparte, pero a medida que avanza y ves que no pasa nada, la incertidumbre de "una explicación" se va diluyendo, hasta el punto de que terminar su lectura se convierte en una tarea pendiente, importándote bien poco la "explicación" que quiera dar. Es como el juego del trilero, al principio estas intrigado por saber donde esta la bolita, pero al cabo de un rato te importa un "carajillo mañanero" donde esta la bola y como hizo para esconderla.
Como lectura "independiente" no esta mal, pero no quiero recomendarla abiertamente por miedo a represalias.

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